Luego vienen esos pequeños ratos de lucidez y esperanza acaso, donde me doy cuenta que todas mis idioteces sirven para algo, sirven para llenar de vida, de realismo, de humanidad las cosas que escribo. Y eso me hace entender que todos nuestros errores sirven de algo: nos enseñan, nos educan. Que todo lo malo, nos deja algo bueno.
Y todo lo malo que me ha pasado quizás no me ha hecho más fuerte, pero si un poco menos pendeja, y quizás un poco, un poquito más sabia, también un poco más amargada pero a la vez un poco más valiente....al menos eso quiero creer.
He estado y me he sentido muy sola este año, pero de esa soledad donde la mente y sus demonios comulgan con uno mismo quieras o no, y te la soledad es sólo el pretexto que te obliga a enfrentarte a ellos, como un retiro espiritual forzoso. Y si bien al principio tanto baño de soledad fue horrible porque no quería estar conmigo misma, terminé sino por entenderme mejor, por llevarme mejor con los demonios de mi mente, los escuché tanto tiempo que aprendí cómo ignorarlos....o al menos, nos conocimos mejor y para bien o mal, eso debe servirme de algo.
Si hay que ser sinceros y dejarnos de quejas este año empezó mal, pero terminó corrigiéndose algo... pasaron cosas buenas como el hecho de que publiqué un libro (y aunque un logro pequeño ya es algo), saqué a gente indeseable de mi vida, vi quienes valían la pena y me querían tener en su vida pese a muchas cosas.... Por la parte mala fue un año lleno de trabajo y poco dinero, mucha introspección que no llevo a nada util.....y mucha ansiedad y miedos y declives mentales; así como falta de salud...Qué me enfermé este año más veces que creo que lo que no me enfermé jamás....
Estoy plenamente conciente de que en este año cambié mucho, físicamente (porque los kilos no son de en balde), y mentalmente. El paso del caos dejó secuelas, pero me enseñó lo necesario y agradezco por ello. No digo que estoy feliz y que fue el mejor año de toda mi vida, porque ciertamente no soy feliz ni fue un año tan bueno, pero ahora estoy segura de que quiero cambiar eso.
Si algo en concreto dejó este 2013 además de mis balbuceos insensatos, fueron ideas masomenos claras, temores a los que enfrentarme, proyectos realistas en los que puedo trabajar, ganas de salir adelante y ponerme seria; también me dejó convertida en alguien más proclive a que le valga madre lo que diga la gente, porque con esta boca tan elocuente que me cargo siempre la voy a cajetear así que mejor preocuparme menos, y más porque la gente siempre se ofende digas lo que digas y hagas lo que hagas... Mastico ahora la firme idea de que debo hablar sin pelos en la lengua porque nunca voy a quedar bien con nadie, y que guardarme las cosas no me va a dejar nada bueno.
Este año me quitó un poco de miedo a perder a las personas, al dolor, fue un año muy raro....pero me mostró que si bien hay hondonadas mentales en mí que no conocía, al menos internamente puedo comenzar a aceptarlas y con ello aceptarme a mí, y tomar valor para salir adelante e ir a donde tenga que ir por lo que quiero... Y espero este 2014 poder sacarme de adentro un poco de esa sensación de mediocridad, porque ya estuvo bueno! Basically I'm done with this shit! : D
Me despido así del 2013, (de una manera un tanto difusa y más breve de lo que esperaba ) y empiezo el 2014, no con esperanzas, sino con coraje y enojo porque ya vi que tenerme compasión no me va a llevar a ninguna parte.
A chingarle pues! Because YOLO :p